nuestra vida es ese río
va a morir:
con él va nuestro extravío,
los excesos del gastar
e consumir
y van los torpes amaños
del número y la manera
de una vida
que si no repara en daños
es, más que vida, quimera
enloquecida
con tanto contaminar
con cada gesto que hacemos
y asumimos,
¿qué se podría esperar
que ocurriera? lo que vemos
ya lo hicimos
ay, el progreso macabro,
el buen vivir que parece
interminable
¿no es más bien el descalabro
del terco humano en sus trece
miserable?
no da su brazo a torcer
y aún redobla en su repique
el vil badajo
de las campanas de ayer,
sin que le importe irse a pique
y al carajo
habrá que ver la manera
de volver a comenzar
nuestra historia
y que un día en la Ribera
de la Vida alce su altar
la memoria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario