lunes, 14 de octubre de 2019

Tarde de viento en la ciudad desierta

La imagen puede contener: interior
Puerta y sombras. Museo Sorolla, Madrid. Foto © AJR, 2019
Cae la tarde. Está el viento poseído
de su voz más antigua y merodea
por los viejos tejados de la aldea

y en la torre en que, niño, estoy subido.

Lo escucho ahora en la ciudad. Su aullido
despierta en mi memoria una marea
de palabras sin fin cuando golpea,
a la vez que en el árbol, en mi oído.

Y así, mientras las horas entretejen
en el quieto telar urbano el tedio
de la indolente tarde de domingo,

los ecos vendavales me estremecen:
el que ahora acaso soy sufre el asedio
del que sin duda fui. Y no los distingo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

"...el que ahora acaso soy sufre el asedio
del que sin duda fui. Y no los distingo."

Gracias, qué peso me quitas de encima (y/o de dentro)
∀nonimo

Alfredo J Ramos dijo...

Gracia a ti, Anónimo. Por leer y comentar.