Gilbert Stuart: El patinador, 1782. National Gallery of Art, Washington. |
—El increíble auge del patinete es una prueba del infantilismo creciente que nos asedia.
—Un ejemplo de libro.
—Tal vez de su falta.
—¡Equilicuá!
—Un día de estos saco ya mi tabla con rodamientos y guía móvil y ya se verá...
—¡Ah, aquellas artesanías!
—Pura autarquía, ya lo creo.
—Oye...
—Oigo.
—¿Y no será que ya nos patinan un poco...?
—(Al unísono): ¡¡Las neuronas!!
...
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