viernes, 20 de septiembre de 2019

En el museo

La imagen puede contener: 6 personas, personas sentadas y boda
Rembrandt: De Staalmeesters o Los síndicos de los pañeros, 1662. Rijksmuseum, Ámsterdam.
Ni ese sombrero de la izquierda está en su sitio, ni ese encuadre de la mesa se sostiene, y las cabelleras —si te fijas— no dan la vuelta a la cabeza, y esas manos, ya ves, no son verdaderas manos. Y sin embargo... ¿qué hacemos aquí tú y yo sin poder quitar la vista de sus ojos, sus ojos, sus ojos...? Tal vez esa sea la grandeza del arte: no recrea la realidad, la funda.
...

Actualmente (hasta el próximo 29.9.19) puede verse en el Museo del Prado, dentro de la exposición: «Velázquez, Rembrandt, Vermeer: miradas afines».

jueves, 19 de septiembre de 2019

Hablarle a Borges (25)


La imagen puede contener: una persona, sonriendo, exterior
Borges en Selinunte, Sicilia, en 1984.
Foto de Ferdinando Scianna/Magnum
(Hablarle a Borges, 83). Dicen que Borges dijo o escribió: «Como quien vuelve de un perdido prado yo volví de tu abrazo. Como quien vuelve de un país de espadas yo volví de tus lágrimas».
Y anoto al margen: «El prado del abrazo, espadas como lágrimas: qué acorde suena la melodía feliz de la asonancia».
No hay ninguna descripción de la foto disponible.
Borges y... Borges.
Tomado de:
Borges y sus laberintos, por Moonmentum.
(Hablarle a Borges, 84). Dicen que Borges dijo o escribió: «Todos los hechos que pueden ocurrirle a un hombre, desde el instante de su nacimiento hasta el de su muerte, han sido prefijados por él. Así, toda negligencia es deliberada, todo casual encuentro una cita, toda humillación una penitencia, todo fracaso una misteriosa victoria».
Y casi sin aliento me atrevo a susurrar: «Creo, maestro, que es difícil de creer. De hecho, más que fe, exige una mente fatal».
Y unos día después: «El caso es que anoche estuve leyendo a Ferlosio, uno de sus prodigiosos laberintos, y creo que esto suyo [de Borges] es un buen ejemplo de “síntesis de la fatalidad”. Los caminos de la lengua casi siempre son senderos. Que se bifurcan, claro».
La imagen puede contener: una o varias personas
Una novedad: para conocer al "Otro" Borges.
(Hablarle a Borges, 85). Dicen que Borges dijo o escribió: «Nosotros vemos apenas un fragmento o un arco siquiera muy leve, pero la circunferencia, la felicidad, la plenitud, existe en alguna otra parte y existirá también para nosotros».
Anoto al margen, por enésima vez: «A propósito de arcos, flechas y plenitudes, viene a cuento, creo, la intuición de Valente: “El hemisferio del arquero en posición de tiro es la mitad visible de la esfera completa que la flecha aún inmóvil ya ha engendrado”. Valente tal vez no fuera muy borgiano pero estaba concernido por la misma materia».
Y días después releo «Cuando la flecha está en el arco tiene que partir», de Ferlosio, uno de sus textos inacabables. Y no se me ocurre nada que decir. Sólo decirlo.

El envite (o la traición)

Édouard Manet: «Stéphane Mallarmé»,1876. Musée d’Orsay, París.
© RMN-Grand Palais (Musée d'Orsay) / Hervé Lewandowski.
«Estas palabras», me dijo sin levantar la vista del papel donde las escribía al tiempo que las pronunciaba, «no están aquí para nada que sea distinto a ellas. Son voces puras. Se limitan a sonar. Y a crear sombra». Como ocurrió lo cuento. Lástima que para ello tenga que..., cómo decirlo, que... traicionarlo. ¿Pero quién vive?
...

miércoles, 18 de septiembre de 2019

Jabois, de nuevo


Quique González & Los Detectives:Me mata si me necesitas (2016) IMG_1057(Lecturas en voz alta). Recuerdo que lo primero que me llamó la atención, hace más o menos una década, de la prosa de Jabois fue su inconfundible aire cunqueirano, no solo por cierto uso de giros lingüísticos y el empleo de tiempos verbales al modo del español que se habla en el noroeste, ni tampoco exclusivamente por la famosa retranca del humor galaico: fue la clara presencia de los signos de un tipo de “inteligencia sintiente” de la que el autor de Mondoñedo es un verdadero prototipo lo que advertí en los primeros escritos del periodista pontevedrés que pude conocer, tal como tuve ocasión de poner de relieve en una vieja entrada de mi blog titulada con un Lean a Jabois más celebratorio que imperativo. Algunas de aquellas intuiciones se ha ido precisando y distinguiendo, en la medida en que Jabois ha ido completando su currículo con una admirable dedicación periodística y un espléndido impulso narrativo cristalizado en un par, acaso tres, libros de gran calidad (ante todo Malaherba). Pero el aroma a lo Cunqueiro no se ha perdido en sus estilo y a veces, como ocurre en esta magnífica pieza de alta cocina memorística, reportera y sentimental (en el sentido vallinclanesco y umbraliano de este último término), se extiende por toda la sala como si la vara mágica de Merlín hubiera vuelto a remover el aire.

Unas gotas de ¿consuelo?

La ría de Vigo. Foto de A Cenador.
(Lecturas en voz alta). Inasequible al desaliento, el gen zumbón del humor galaico maquina entre los signos visibles de la catástrofe hasta extraer un poco de ¿consuelo? Téngase en cuenta que el artículo está escrito antes de la (pen)última gota fría. Y no parece tener en cuenta que ya Julio Verne, que con el Nautilus faenó entre los pecios de la ría de Vigo, se anticipó también en esto.

_Lecciones

Claudio Gallina: Saltá ahora. Col del autor, Buenos Aires.
—Atención, niñas, niños, ¡examen sorpresa! Hay que completar la frase escrita en la pizarra con las consonantes que faltan. Tenéis 7 semanitas 7. No vale bostezar.
(La frase:)
__OTAR, __OTAR y VOLVER a __OTAR.
(Se admiten soluciones).

martes, 17 de septiembre de 2019

Savater y el dolor que no se cura


(Al hilo de los días). Conviene no confundirse. Puede parecer que por ahí fuera pasan cosas de gran importancia y trascendencia, y alguna hay que retumba mucho. Pero lo verdaderamente importante sigue teniendo que ver con la vida, que sigue, con el amor, que sobrevive, y con la muerte, que espera y nos marca. Palabras de verdad en medio del furibundo y falaz vértigo. Fernando Savater entrevistado por Carlos Alsina: palabras necesarias.


La imagen puede contener: una persona, sonriendo
He aquí uno de los libros que más he deseado tener a mi alcance en los últimos años. Clara, la amable y competente librera de El Buscón, me daba un ejemplar de (ya) la segunda edición. Al final, me lo ha cambiado por el ejemplar del escaparate.