jueves, 10 de febrero de 2022

Los Goya del ¿regreso?

Ya están aquí los Premios Goya, en su trigésimo sexta edición y de regreso (confiemos) a una cierta normalidad. Curiosamente, y pese al signo de los tiempos, es uno de los años que más películas he visto en las salas, a menudo casi en soledad, aunque también ha habido excepciones cuasi "multitudinarias". A veces, en los momentos de espera antes de la proyección, me ha dado por pensar en la suerte que tengo de poder disfrutar aún de este viejo rito del ir al cine, y además de manera más cómoda que nunca. Pero de inmediato me asalta la melancolía y echo de menos aquellas calles pobladas por colas de personas a las puerta de los muy numerosas y palaciegas salas, con sus fachadas cubiertas por grandes carteleras, el trajín con los amigos, los ritos anejos. Tiempos que no volverán, aunque las historias filmadas serán un placer... mientras el cuerpo aguante. 

Nostalgias aparte, vayamos al grano: esta es mi apuesta para los premios de esta edición de los GOYA XXXVI.


☻ 
Goya de honor:
 José Sacristán. Un premio indiscutido, indiscutible. Y que acaso llega un poco tarde. Pero llega. Tanto en su perfil cinematográfico como en su condición de actor teatral, la trayectoria artística de José Sacristán destaca por su plena implicación creativa en cuantas obras ha particpado y, en ocasiones, asumiendo las tareas de dirección. De las 165 pelìculas como actor que recoge la IMDB es díficil elegir las más relevantes, pero como este formato esta abocado a la apuesta y la decisión destacaré, por orden cronológico inverso, el repóquer +2 de las que recuerdo haber disfrutado más:  Magical Girl (2014), Madregilda (1993), El vuelo de la paloma (1989), El viaje a ninguna parte (1986), La colmena (1982), Un hombre llamado Flor de Otoño (1978) y Parranda (1977). Parece que el gran actor ya se ha despedido del cine. Quièn sabe. Quizás aún le quede algún papel en la chistera. 

☻ Goya internacional: Cate Blanchett recibirá este recién creado galardón, por ser "una figura extraordinaria del cine mundial y una actriz que interpreta personajes inolvidables que ya son parte de nuestra memoria y de nuestro presente", razones que, sin duda, pueden aducirse para un buen número de actores y actrices. Puede que no sea ajeno a la elección el hecho de que la actriz australo-estadounidense será la protagonista de la próxima película de Almodóvar, Manual para mujeres de la limpieza.

Mejor película: El buen patrón. Es sin duda la gran favorita y, aunque tendrá cierta competencia, tanto por parte de Madres paralelas como de las excelentes y cuasidocumentales Maixabel y Mediterráneo, creo que se acabará imponiendo. Como ya he comentado en otro sitio, todo son parabienes, y muy merecidos, para este filme de Fernando León de Aranoa. En parte, puede considerarse un regreso al tono y al ritmo de Los lunes al sol (2002) y su hincapié en las relaciones laborales, sólo que ahora vistas desde el otro lado: el paternalismo de la patronal. La película es una exhibición interpretativa de Javier Bardem, con un guion que avanza mediante unos medidos, ocurrentes y singulares diálogos, marca de la casa. No es menos destacable el hallazgo que dota a la historia de una tan potente como certera mezcla de reflexión sobre la naturaleza del poder, el entramado de las relaciones afectivo-laborales y el sentido de la justicia y sus contrapesos: y es que todo ello está ambientado en una fábrica de básculas que, por supuesto (ejem, ejem), nada tiene que ver, simbólicamente, con nuestra tan penosamente judicializada vida política. Aunque no ha tenido fortuna en la previa de los Óscar, su triunfo en los Goya parece cantado. 

Mejor dirección: Fernando León de Aranoa por El buen patrón. Pudiera ser, con todo, que Pedro Almodóvar diera aquí una relativa sorpresa.
  
Mejor actriz protagonista: Penélope Cruz, por Madres paralelas. ¿Se va a ahorrar la gala de la Academia el momento cumbre de ver galardonada a la pareja de moda no sólo del cine español? Por otro lado, el papel de la actriz de Alcobendas en la película es probablmente la baza más poderosa de un irregular filme. Algunas opciones tiene también Petra Martínez por La vida era eso.

☻ Mejor actor protagonista: Javier Bardem, por El buen patrón. Ya quedan expuestas las razones.


Mejor dirección novel: David Martín de los Santos por La vida era eso. Creo esta será una de las categorias más disputadas y puede que a esta historia le favorezca el revuelo montado en torno a las declaraciones de su protagonista Petra Martínez y su lúcida reivindicación del disfrute del sexo a cualquier edad.

Mejor guion original: Fernando León de Aranoa, por El buen patrón. El peso de los magníficos diálogos y el dominio del ritmo narrativo, con situaciones dramáticas contrapuestas muy bien pautadas, son aspectos fuertes de una historia que tal vez tenga algún exceso, pero bien asumido o disimulado en un desarrollo equilbrado y con momentos muy brillantes. Pudiera ser que diera la sopresa la excelente reconstrucción de un importante encuentro en el entorno de la tragedia del terrorismo y el final de ETA llevada a cabo por  Icíar Bollain e Isa Isla en Maixabel.

☻ Mejor guion adaptado:  Daniel Monzón y Jorge Guerricaechevarría por Las leyes de la frontera, a partir de la novela homónima de Javier Cercas. Opciones para Benito Zambrano y Cristina Campos, por Pan de limón con semillas de amapolas, a partir de la novela de igual título de la coguionista. 

Mejor actriz de reparto: Milena Smit, por Madres paralelas. Citaré también a la siempre solvente Nora Navas por Libertad.

Mejor actor de reparto:  Manolo Solo, por El Buen patrón. Un voto de confianza para Urko Olazabal, por Maixabel. 

Mejor actriz revelación:  Ángela Cervantes por Chavalas. Sin descartar a María Cerezuela, por Maixabel.

Mejor actor revelación: ☻ Chechu Salgado, por Las leyes de la frontera. Anoto también a Jorge Motos por Lucas.


Y en las demás categorías...

Mejor música original: Alberto Iglesias por Maixabel. Opciones para Arnau Bataller por Mediterráneo.
Mejor canción original: Que me busquen por dentro, de Antonio Orozco y Jordi Colell Pinillos, en El Cover.
☻ Mejor dirección de producción: Albert Espel y Kostas Sfakianakis, por Mediterráneo.
☻ Mejor dirección de fotografía: Kiko de la Rica, por Mediterráneo.
Mejor montaje: Nacho Capillas, por Maixabel.
Mejor maquillaje y peluquería: Almudena Fonseca y Manolo García, por El buen patrón.
Mejor dirección artística: César Macarrón, por el El buen patrón.
Mejor diseño de vestuario: Alberto Valcárcel, por El amor en su lugar (Love gets a room).
Mejores efectos especiales: Álex Villagrasa, por Mediterráneo. Con opciones para Raúl Romanillos y Ferran Piquer por La abuela.
Mejor sonido: el equipo de Madres paralelas.
Mejor película de animación: Mirolins.
☻ Mejor película documental: Quién lo impide, de Jonás Trueba.
☻ Mejor película iberoamericana: La chilena La cordillera de los sueños.
☻ Mejor película europea: Otra ronda, danesa. Opciones para la francesa Adiós, idiotas.
Mejor corto de ficción: Mindanao, de Borja Soler.
Mejor corto documental: Ulisses, de Joan Bover.
Mejor corto de animación: Umbrellas, de Álvaro Roberts y José Prats.

 Aciertos ☻ Aproximaciones

miércoles, 2 de febrero de 2022

Cita en el Retiro

Una cita para el próximo miércoles, 9 de febrero 2022, 19:30 h, en la Biblioteca Eugenio Trías del parque del Retiro de Madrid (antigua casa de fieras y “leones”). Nos reúne Amargord Ediciones en torno a cuatro de sus últimas publicaciones. Entre ellas, dos libretos míos en un solo volumen: Piedad seguido de Adagia Andante. Están todos invitados.




lunes, 31 de enero de 2022

Siglos de Oro

Elena Guerrero: Tertulia nanaísta de Pombo (2016).

                        (Amigos en un bar)

No he de callar, ladino, lo QUE VEDO
en esta que de GONG hORA es sonando
pues LO PEor de lo que está pasando
aún me exaCERBA aNTES que darme miedo.
Son voces DE LEÓN, ROJAS y fieras,
las que más me inTERESAn por su canto:
las busqué en aquel SOTO y, mientras tanto,
cruzaban por mi sien nubes gu(H)ERRERAs.
Los oscuros MOLINOS DE LA VEGA
donde JUAN DE LA CRUZ vio la blancura
junto AL ARCO Nimbado del portón
mueven, en su baTIR SObre la ciega
voz del sueño, la música más pura
atrapada en un largo CALDERÓN.
Un lugar siempre abierto es el que invoco:
¡Nos vemos en la barra del BAR ROCO!
(Hojas sueltas del lunes, y 100)

Concluye aquí esta sección de Hojas sueltas del lunes» mantenida durante 100 semanas y por la que han ido desfilando poemas de muy diversa condición, algunos de los cuales confío en que tendrán, no tardando mucho (aunque quién sabe), una segunda vida en el papel (algunos ya la tuvieron). Soy consciente, con todo, del privilegio de haber contado con la atención de un muy selecto grupo de lectores, de todos los sexos y de edades y ocupaciones muy diversas, a quienes les agradezco de corazón su compañía. Seguiré de momento en el muro de Facebook con las LUN y con comentarios ocasionales de actualidad, aunque la idea de abandonar estas redes es cada vez más tentadora y, de hecho, mi manejo de ellas es más bien intransitivo y perplejo: me parece que nos hemos metido en un lío morrocotudo y no sé por cuánto tiempo será posible seguir huyendo hacia adelante.
Salutem pluriman!

lunes, 24 de enero de 2022

Que o qué

 


Sobre los signos que
no sabemos qué
nos están diciendo o qué
podrían revelarnos a poco que
fuéramos capaces de entender que
lo que nos dicen sin que
nosotros lo sepamos es sólo lo que
ya sabemos y a menos que
haya algo que,
en el fondo de nuestra mente, sepa que
hay algo que
nos resulta tan desconocido que
ni siquiera podemos sospechar que
pueda existir, y ocurra así que
la única verdad sea que
nada o casi nada de lo que
podemos decir sea eso que
en realidad querríamos saber o que…
La pregunta que
no tiene respuesta… ¿qué
pregunta? ¿por qué?

lunes, 17 de enero de 2022

Ritornello

 


Vuelvo al lugar del crimen, aunque aquí
apenas queda nadie. ¿Es el final
de tanta murga o un sueño de arrabal
naufragado en un charco carmesí?
Cómo saberlo. Vuelan por ahí
sospechas, resonancias, y el cabal
sentido del deber, con su imperial
poner en orden tanto frenesí.
Me atengo al juego. Si en cada ocasión
que el ‘ritornello’ escucho en la canción
me sumo al bailecito sin por qué,
será que un aire antiguo, en su trantrán
cosmocómico, aún rompe el celofán
de mi alma vieja y ella saca el pie
quebrado, tipo
el del gran Byron o el del mismo Edipo.
Y ya en la danza de mi alma vieja
que crea el cosmos con su afán en celo
busco en el aire un ritmo tras el velo
de Maya ausente, y en el baile cito
el ritornello alegre y, despacito,
limpio mi cuerpo, ay, de toda queja.
¡Qué alegría el sentir de los sentidos
libres al fin, conscientes del placer
que sólo por el hecho de nacer
a toda criatura, en los latidos
del pulso de la vida, es menester
concederle! Y así, entre bufidos,
tantos recalcitrantes consumidos
por la ira 😤 verán lo que hay que ver.

(«Hojas sueltas del lunes» ~ “Nuevos pulsos de luz. * Sonetos de acordeón”)

lunes, 10 de enero de 2022

Ganga esbirra



Una columna de humo que se alzaba
sobre el reloj desnudo de aquel día
me vino a recordar tiempos pasados
acaso ya abolidos en mi cuerpo
y el mismo mineral que se sentía
ganga esbirra arrojada a la caldera
podía hervir de nuevo
hacerse digno
de soportar pendones en batallas
o locuras que no tienen remedio
y sólo se enmascaran en el humo.

domingo, 9 de enero de 2022

«El CAMINO DE SER TESORO Y RUINA»

Edward Hopper: Dos cómicos, 1966. Colección particular
(durante algún tiempo perteneció a Frank Sinatra).

Qué fácil es a veces dejarse llevar por la sintonía evidente —¿evidente?— de lo que nos conmueve sin porqué. Y qué extraño consuelo —como en el oratorio aquel de Amancio Prada— nos proporcionan gestos y querencias, sintagmas y susurros, voces que, dichas en voz alta o solo proyectadas en las hondas cavernas íntimas del cerebro, nos llevan de la mano hasta el borde mismo del escenario, ya sin telón de fondo, para reconocer que el fin de la función no va a pillarnos fuera del sentido, torpe o sensato pero nuestro, de lo que llamamos vida viva, ni del hecho de sabernos que también pudiéramos ser «como dos actores sin papel… que sin ruido atravesaran en su adiós la escena». Ah, el tesoro compartido de las palabras, cómo consuela aunque sepamos que no va a librarnos del designio de las ruinas circulares que están por todas partes.

(LUN, 871 ~ «De la vida misma»; a partir de un poema de Francisco Caro, en “Fuentévar”, y “para celebrar Enero y Nueve de 2022”).