(En voz alta). Unos acordes oídos al azar en la radio conectan de pronto, en las neuronas profundas, con la pieza más gorgojeante (!) de Jethro Tull. Y, gracias a la actual tecnología, los recuerdos son deseos que son actos (no tardará en llegar el momento en que el solo desearlo será suficiente para reproducirlo). Aquí están esas ráfagas que tantos ratos buenos nos dieron en nuestra juventud, ahora con un Ian Anderson (nuestro mejor conductor por el reino epiceno de Hamelin) ya talludito pero aún juguetón. Y una sugerencia (probablemente absurda) sobrevenida: ¿no hay cierto parecido razonable con Arguiñano..., especialmente en algún gesto? En todo caso, rico, rico.
lunes, 7 de septiembre de 2020
Afición tanta
1
viernes, 4 de septiembre de 2020
Subida al Monte Toro
jueves, 3 de septiembre de 2020
Horizonte dado
miércoles, 2 de septiembre de 2020
Fenómenos imposibles
martes, 1 de septiembre de 2020
Secretos de la tribu
(En voz alta). Segredos das terras altas de Quiroga. Asuntos de mucha raigambre. La difícil mirada hacia lo hondo. Interesante reportaje en El País.
Leer (o no) la prensa
(Resonancias). La Nota Moderadamente Apocalíptica sobre el peligro de desaparición de la prensa libre es de hace, justamente, tres años. Por una extraña reiteración cronológica que me viene ocurriendo a menudo, esta mañana me he despertado pensando que uno de los grandes inconvenientes de la comunicación en nuestro mundo es la cada vez más rara lectura de la prensa en papel, dado que acrecienta la dificultad para compartir “lugares comunes” y supone una gran merma de trasfondo para los posibles diálogos. Releyendo hoy el texto, no tengo ninguna duda de que la situación es peor. Si bien me parece que corresponde a un mundo del que tengo la impresión de que está mucho más lejano en el tiempo de lo que deberían parecerme “sólo” tres años. Claro que han ocurrido cosas que eran inesperadas. Y que, con ellas, una de las dimensiones más alteradas es, precisamente, el tiempo, ese enigma.
(NMA, 5). Uno de los grandes peligros que se ciernen sobre el futuro inmediato de nuestra sociedad es el del empobrecimiento e incluso desaparición de la prensa libre, competente, fiable. Las dificultades que ya hoy tiene cualquier ciudadano medianamente avisado para tener información relevante y lo más completa posible de lo que ocurre, en un mundo cada vez más complejo y, pese a las apariencias globalizadoras, disperso e invertebrado, son directamente proporcionales a la multiplicación de supuestos medios informativos «serios y razonables», en los que, sin embargo, cada vez se adelgazan más las diferencias entre información y opinión, relevancia y publicidad, interés común y curiosidad mórbida.A lo que hay que añadir el inmenso ruido de la riada que la cháchara interminable de las redes sociales hace afluir en todas direcciones, con una contundencia tal y unos perjuicios a menudo tan asoladores, que realmente dejan chicos los efectos cada vez más indudables del cambio climático.Para complicar aún más las cosas, en este escenario no faltan, más bien al contrario, los viejos tics autoritarios del poder, tal como muestran, entre otros recientes comportamientos, las represalias tomadas contra el director del informativo de la 2, una isla en la planicie telediaria de RTVE, o las maledicencias del Gobierno catalán contra quienes han evidenciado sus tejemanejes, por poner sólo dos ejemplos cercanos.Estos viejos pulsos entre el poder y la prensa libre por el control del «relato de la realidad» no son algo nuevo, ni mucho menos. Sólo que ahora se vuelven mucho más confusos y de efectos más devastadores porque se producen en un panorama donde cada vez es más difícil estar seguro de nada. En el terreno informativo, me refiero. Que de otras certezas o dudas no hablo ahora.La desaparición del periodismo tal como lo hemos conocido no tendría que suponer ningún problema si fuera acompañada de un cada vez más autónomo acceso a la información de calidad, algo que los nuevos medios tecnológicos sin duda hacen posible. Pero el paulatino ahogamiento de la capacidad influyente de la prensa libre por exceso de guirigay y embotamiento generalizado enciende algunas alarmas sobre el inmediato futuro de nuestra capacidad, no ya de influir sobre el devenir del mundo, sino simplemente de saber qué rayos está ocurriendo a la puerta de nuestra casa.
lunes, 31 de agosto de 2020
Soneto in progress
https://www.facebook.com/pedro.poitevin/videos/10163886731585062
Estos juegos no acaban con la muerte.
No sé si con nuestra paciencia.
Iris (sextina)
domingo, 30 de agosto de 2020
Trikiklos (y 42)
sábado, 29 de agosto de 2020
Adios, cine, ¿adiós?
Tour con mascarillas
Kasper Asgreen, ciclista del Deceuninck Quick-Step, en Niza, donde se inicia el Tour 2020, en un entrenamiento, S. Nogier / EFE |
(Al filo de los días). El amigo Montano, tal vez a estas alturas el mayor y más inspirado amante del deporte ciclista que conozco (sus poemas-pastiches del Tour deberían ser impresos), ha saludado la imagen que ilustra la información del inicio de la Grande Boucle con un «Qué belleza», escueto y contundente, realmente estremecedor. No he tenido más remedio que contestarle tirando de fondo de armario: «Ni Samotracia ni Niké otra alguna. ¿Quién habla de Victorias? Que vuelva el Tour es todo».
¿Unicornios o carneros?
En estos versos que de nueveen nueve van por el caminono se me ocurre decir nadaque pueda —al bies— torcer el ritmo.Porque, ay, amigo, tú bien sabes—si no yo aquí ya te lo digo—que pocas bestias hay más raras,en lo tocante a metros fijos,que los cabrones eneasílabos.
viernes, 28 de agosto de 2020
Trikiklos (41)
Pisando ceniza, de Manuel Arroyo Stephens
(En voz alta). Inclasificable, en efecto. Memorias, sí. Pero probablemente, y sobre todo, el cumplimiento de un consejo que en realidad era una orden que en realidad era una herencia: de la amistad y la extrema confianza (ese difícil matrimonio): «Escribe». Sabemos bien que no es fácil llegar a esta llaneza, tan complicada, a esta naturalidad, tan envolvente. Trapiello (nota en la cuarta de cubierta) dice: «Un libro que no suena a nada de los que sus compañeros de generación han escrito. No parece ni siquiera español, no parece ni siquiera literatura». Aún no lo he terminado. Pero puedo decir que dentro están 96 páginas inolvidables, únicas, absorbentes, con la mejor aproximación a un autor del que en ningún momento se dice su nombre. Una revelación.
jueves, 27 de agosto de 2020
Agustín antes de santo
Mañana es San Agustín, hombre de gran corazón. Sabio en tantas cosas. Un verdadero “vividor” (como Pau Donés, si se me permite la ocurrencia), cuya inteligencia aún nos ilumina, aunque no compartamos su deriva espiritual ni –tanto tiempo después– cierta autoinculpación innecesaria y algo fanatizada tras la admirable aventura del corazón humano. El agua corre y, como sostiene el sentido común y recalca algún amigo sabio, “siempre encuentra su camino”.
martes, 25 de agosto de 2020
Trikiklos (40)
lunes, 24 de agosto de 2020
Un regalo de Amancio Prada
(En voz alta). No son infrecuentes los regalos de artistas en este verano de los raros tiempos. Aunque no siempre nos pillen con el estado de ánimo y la disponibilidad suficientes para valorarlos como se merecen. Por eso, y por su naturaleza excepcional, no quiero dejar pasar este hermoso detalle que nos brinda, con su habitual maestría y delicadeza, el gran Amancio Prada, siempre tan generoso. Como suele decirse, oro en paño. En este enlace.
Obras Completas (A-Z)
(“Itinerario de islas”)
Agua Aliento Alegría
Amigo Amor Asombro
Azul Bosque
Danza Desierto
Deseo Duda
Espacio Estrella Extravagancia
Fulgor Hierba
Inocencia Instinto Inteligencia
Levedad Lluvia (Lumbre-Luz)
Madre Mañana Mar Memoria Miedo
Mirada Misterio Muerte Mujer Música
Noche Nombre Oscuridad
Pájaro Paz Piedra Piel Río
Sí Silencio Sol
Soledad Sospecha Sueño
Territorio Tiempo Tierra Tristeza
Vida Viento
Vuelo...
Wow, Xa, Ya,
Zas!
domingo, 23 de agosto de 2020
Junto al mismo mar de Roma
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Por cayetanas
(
En voz alta). Buena parte de las columnas de opinión en la prensa de hoy torean, por así decir, por cayetanas, un tipo de escritura de largos pases y poco quiebros, sólo los necesarios para que el diestro se haga reconocible en el centro del medio donde oficia y deje claro, de una vez por todas, que en lo tocante al tema candente él "toca pelo": vamos, que tiene razón. Dibujo de Fernando Vicente.
De los varios análisis leídos sobre la figura de la semana («Es o era del PP y s
e llama Cayetana», podríamos decir en singular homenaje a mi paisano Gregorio Corrochano), destacan sobremanera dos. Uno, el del Nobel Mario Vargas Llosa, en El País, ofrece un recorrido en verdad estimulante: a través de una prosa limpia y bien ceñida, con vuelo y gracia, se pone al servicio de un perfil hagiográfico no exento de subrayados verosímiles, pero todo él impregnado de un tufo turiferario y militante que no extraña pero tampoco convence —imagino— más que a los que ya. Y el otro, en El Mundo, es el indómito Arcadi Espada que, con la soltura e impiedad que le caracterizan, se aplica en pasarles cuenta a los colegas que, tras la caída de la hasta ahora portavoz conservadora, han exhibido los muñones restrictivos de la falta de empatía como excusa de su fracaso, el de ella, mientras que los jaleantes tenían “razones objetivas” para su encumbramiento.
El envite de Espada gana mucho cuando en él comparece, bien traído, Ferlosio, del que cita por extenso la parábola, o más bien comparanza, de los dos viajeros disímiles que acceden al tren.
Tampoco está mal, como cierre, la cita al bies de la luminosa copla de Lole y Manuel: «De lo que pasa en er mundo / por Dios que no entiendo na: / el cardo siempre gritando / y la flor siempre callá».
Busquen y lean. Merece la pena.
miércoles, 19 de agosto de 2020
A vueltas con el disco de Festos
Nuevas noticias, aunque con apenas novedades, sobre el disco de Festos. ¿Algún día se llegará a saber la verdad? Aunque los símbolos a los que encomendamos nuestros deseos íntimos están más allá de esa categoría. Son, más que nada, objetos de poder.
Trikiklos (38)
Tomado de aquí. |