Este chico, al que en los últimos años la muerte se le transparentaba en la cara, tenía un corazón capaz de desterrar la evidencia de esa sombra que finalmente le ha vencido. ¿Vencido? Antonio Vega, como todo verdadero artista, es sus obras, y seguirá latiendo en ellas gracias a la capacidad de crear emociones duraderas y extensas que sólo algunas sensibilidades poseen.
Creo que en breve va a aparecer un libro con su obra poética (las letras de sus canciones y quizás otros textos). Nos permitirá comprobar (aunque ya lo sabemos) que era también un excelente dibujante de palabras, un explorador de mundos.
Entre las canciones que más me gustan de un muchacho triste al que los de la generación nacida en los 50 hemos visto ir envejeciendo en nuestro propio espejo, ésta es mi favorita. La enciendo como tributo al artista.
Descanse en paz.
(Otra versión, de mayor calidad, pero quizás no tan emotiva, aquí)
Procedencia de la fotografía: videoartecanarias
3 comentarios:
Siempre lo vivió todo a tope, hasta el final. Descanse en paz, se lo merece. Y por fin estará con su Marga adorada. Al final será verdad eso de que siempre se van los mejores...
Y en otro orden de cosas, más coincidencias, ademas de ser de la generación de los 50, detrás de mi las generaciones galaicas se pierden en la noche de los tiempos... pero aunque me crié, tampoco vivo ni nací allí.
Vuelve cuando y cuanto quieras, presiento que será un placer conversar contigo Alfredo.
Saludos.
Ah! se me olvidaba, lo siento por Pancho, pero mi perrita yorkshire Líli, (2,500 Kg.) es la más lista del mundo mundial ¡que lo sepais! jajaja!.
Pero debo reconocer que se le ve el carácter, hasta en esa foto.
Hasta más ver.
Gracias Cristal por tu visita. Le he leído al ayudante de la posada lo que comentas de Lili y dice que «Bueno» (o mejor: «Buenoooo!!»). Hasta pronto.
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