jueves, 5 de enero de 2023

ALAS


Uno de los muchos «Ángeles» que pintó
Ginés Liébana a lo largo de su larguísima trayectoria 
como pintor, poeta y autor dramático. 
Está fechado en París en 1953. Anda por casa desde al menos 1982.

«A la una anda la mula, a las dos tira la coz, a las tres…». Siempre que pasaba por el callejón empedrado, a veces incluso alicaído, llegaba a su memoria la misma cantinela de los niños entretenidos morosamente en sus juegos y como ajenos a todo lo que no fuera conseguir un puesto bien considerado en el corro de los mejores. Y como siempre, ante el brillo de aquellos ojos y los entusiasmos de aquellas voces, le crecía por dentro del espíritu puro una envidia terca y casi atroz: ¿cómo sería tener un verdadero cuerpo? Se prometió que de este ciclo no pasaba. Al final de esta misma guardia, y aprovechando las brumas favorables de la noche de reyes, tramitaría una excedencia para trajinar en carne mortal durante una buena temporada. Y luego ya se vería.
(LUN, 509 ~ Homenaje a Ginés Liébana, 1921-2022,
fallecido el pasado 31 de diciembre)

miércoles, 4 de enero de 2023

EL TESTIGO

 

Henry Holiday: Dante y Beatriz, 1884. Walker Art Gallery, Liverpool (editada).

En cada vuelta completa del sol, mientras el agua no cesa de correr bajo los puentes, el hombre del cuadro se demora en su manera de mirar. Y así van pasando los días y las noches.
(LUN, 510 ~ 4/1/23)

martes, 3 de enero de 2023

MEMENTO MOMENTO

Zahar Kondratyuk: Muhammad Alí (2022). Acrílico sobre lienzo.
Yo trataba de escribir «para el fin de año» y una y otra vez la pantalla me devolvía «para el infinito Alí». De hecho, esto que ahora tal vez puede leerse no es lo que quería escribir. Claro que hay muchas posibilidades de que lo que tú (usted, vuacé, vueça merced) estás leyendo se parezca muy poco a lo que esperabas leer. Te sirve, sin embargo, igual que a mi, para darte cuenta, siquiera sea de un modo muy fugaz y casi inaprensible, de que este instante ya no está. No está. Tampoco Alí.
(LUN, 511)

lunes, 2 de enero de 2023

EXEQUIAS

El Guirria de San Juan de Beleño en plena faena.
Foto de Juanjo Arrojo, para Turismo Asturias.

Desde su agujero invernal —lleva en él desde hace semanas, puede que meses—, Nostra me manda un ‘gusarapo’ (el nombre es suyo), con el título que ahí arriba figura y el siguiente texto: «Para ser principios de año no está mal que la prensa toda coincida en subrayar una palabra que parece el nombre de un profeta. Incluso El Guirria asturiano parece estar de acuerdo». He podido saber, tras alguna pesquisa, que el susodicho Guirria es una especie de trasgo carnavalesco, con ciertas tendencias marcadamente rijosas, que se pasea por las calles del San Juan de Beleño, en el concejo de Ponga. Junto a él, otros personajes a caballo van pidiendo el aguinaldo, en lo que puede considerarse una mascarada con reminiscencias de rito de paso y una forma divertida de comenzar el año. Lo que no he podido explicarme es por qué Nostra lo trae a colación. Sin descartar segundas intenciones, me inclino por pensar que es pura serendipia.

(LUN, 512 ~ «La cosas de Nostra»)

domingo, 1 de enero de 2023

¿UN MAL PRESAGIO?


La serie «Los figurantes de Javier Serrano» está ilustrada con obras de
Javier Serrano,como parece obvio, pero para que conste.
No son ni serán tanto textos ilustrados como ilustraciones textuales.
Conste también. Tenemos por delante muchas lunas.

¿Y usted quiere hacerme creer, amigo, que estas cosas ocurren por mero azar e incluso de forma independiente a cualquier otro giro de palanca en este mundo sublunar? Mire, no seré yo el que le vaya a discutir ahora sus creencias o la falta de ellas, faltaría más. Solo (sin tilde) he venido a decirle, y procuraré írselo demostrando con hechos tangibles (o al menos bien legibles), que no está solo y que podemos entendernos. Por de pronto (curiosa admonición), deje usted las pantallas y véngasela a la calle, y ya verá cómo todo empieza a tener otra consistencia.
(LUN, 513 ~ «Los figurantes de Javier Serrano»)

sábado, 31 de diciembre de 2022

SAN SILVESTRE Y El ÚLTIMO FÓSFORO

Camille Pissarro: Boulevard Montmartre, Effet de nuit, 1897.
National Gallery, Londres.

Venía corriendo perseguido por el cerco de la luna en fase gibosa creciente, el ruido de los contenedores de vidrio al ser alzados para su transporte, el parpadeo de los arcos de luces navideñas movidas por súbitas e intempestivas ráfagas de viento, el estruendo intermitente de los petardos más madrugadores y, más espaciados pero no menos perceptibles, los ensayos de afinado y puesta a punto de las campanadas en los muchos relojes de plaza o
de espadañas eclesiales con que se fue cruzando en su camino.., y pese a todo, llegó a tiempo de poner su vela en la mesa vecinal ya dispuesta para la celebración y lo hizo justo cuando también se incorporaba a la fiesta el antepenúltimo invitado: ‘Gédéon Spilett, que halló en su bolsillo un último fósforo’.

(LUN, 515 ~ «Perec al paso», 177)

LA RUTA NATURAL

—¿Y dice usted que por aquí voy bien?
—Depende de a dónde quiera ir.
—Ya me gustaría a mí saber eso.
—Pues ya somos dos.
—Tendrá claro al menos a dónde no quiere ir.
—Más o menos. Aunque…
—¿Tampoco en eso está usted libre de dudas?
—No me puedo librar de lo que soy.
—No insisto, pero ya veo que…
—No insista.
—Claro.
—Y previsto.
—Como decía el clásico.
—¿Cuál de ellos?
—El clásico clásico.
—Ah, el de “ver es prever”.
—¡Ese mismo!
—Algo, con todo, me guía.
—¿Tiene un perro lazarillo?
—Más o menos.
—¿Más o menos?
—Mitad can y mitad lázaro.
—No me venga usted con esas.
—Ladrar y resucitar.
—¿En ese orden?
—La inversa también me vale.
—Se diría que es incluso…
—… ¿la ruta más natural?
—Ese ‘más’ está demás.
—Suele ocurrir.
—Sabe qué…
—Ahora me dará un consejo.
—Consejo no, pero un lema…
—Diga, diga.
—Para las encrucijadas…
—Tan frecuentes.
—Y en las bifurcaciones…
—¡Y dónde no…!
—Suelo seguir un principio…
—Que dice…
—¡Siempre contra los tópicos!
—¡Menudo tópico es ese!
—¡Pues vayamos contra él!
—¿De consuno?
—¡Al alimón!
—¡Feliz 3202…
—… 2023 zileF!
—¡Ay, bumeránico amigo!
—Si yo le contara, sire…
—Pues no me voy a dejar.
—Hace usted requetebién.
—Además es que…
—¡Ya supongo!
—Presume acaso que…
—… que sé lo que va a decir?
—No tiene mérito alguno.
—¡Hombre, alguno sí que tiene!
—Es verdad: nunca como aquí es tan duro…
—… pero duro de verdad…
—… reducir el embeleco…
—… salir de la jerigonça…
—… parlarlo con claridad…
—… y saber, en la peonza,
—… cuál es la voz, cuál el eco.
—Agur, pues.
—Hasta la vista.
—Nos vemos.
—Ya se verá.
(LUN, 514 ~ «El retorno de los Merluzos»)
[Mientras estos dos hacen mutis por el forro, me permito inmiscuirme para desearles de verdad y sin intermediarios un venturoso y aventurero 2023. Lo hago, además, aprovechando la felicitación que me ha hecho llegar el pintor Servando Corrales, tan en sintonía con los tiempos que corren e inspiradora del texto adjunto. Lo dicho. Y lo no dicho. Y lo por decir].