lunes, 19 de febrero de 2018

Vértices

Resultado de imagen de Lluvia de neutrinos + ruinas mayas
El universo y sus constelaciones, incluidas las mayas.
(Lecturas en voz alta, 58a). A poco que uno sienta curiosidad por aspectos del mundo que vayan más allá de la política, las pugnas deportivas, la realidad apantallada o el particular ónfalos redundante, hay que reconocer que vivir es una fiesta en la que de continuo estamos invitados a participar en realidades sorprendentes. Como lo son estos descubrimientos de arqueologías milenarias que, de un solo pero bien fundamentado vistazo, son capaces de asomarnos a toda una rama (otra más) de la literatura fantástica en su versión de mitos fundacionales que ayudan a comprender las raíces más profundas de lo que somos. Y también de dónde venimos, si pensamos, por ejemplo, en las informaciones que dan cuenta de uno de los proyectos físicos más punteros: el Experimento de Neutrinos Subterráneo Profundo, una de cuyas peculiaridades —y quiero pensar que no menor— es el afortunado hecho que por sus siglas en inglés lleve el nombre de DUNE, esa memoria.

Con estas lecturas compartidas, además de dar cuenta de cosas que me salen al paso y cuya difusión juzgo interesante, trato también de establecer mi propio itinerario de pistas fácilmente localizables en la tablilla mágica del iPhone, a fin de tenerlas a mano en la próxima «conexión». Era mi intención esta vez enlazar el sencillo pero preciso artículo que Bruno Martín, desde Chicago, escribe sobre la última y quién sabe si definitiva trampa para cazar neutrinos, pero en el tránsito se me cruzó la otra información, de modo que al final he decidido sumar las dos (véase la entrega siguiente), entre otras cosas porque creo firmemente que hay una secreta (o no tanto) red que las une. Al fin y al cabo, el rostro de Maya tiene todos los rostros y a Dune se llega por mil y un caminos.

sábado, 17 de febrero de 2018

Espejo

Uno se sueña don Quijote.
Y luego, si despierta y hay suerte,
saluda a Sancho en el espejo.

Uno se sueña Don Quijote. Y luego, si despierta y hay suerte, saluda en el espejo a Sancho.

Uno se sueña Don Quijote. Y luego, si despierta y hay suerte, saluda en el espejo a Sancho.

viernes, 16 de febrero de 2018

Chinapro: ¡guau!

Resultado de imagen de Año nuevo chino en televisiòn
Feliz año 4716, según el computo chino, año del Perro de Tierra.
(Lecturas en voz alta, 🎎59). Coincidiendo casi milimétricamente con la inauguración del nuevo año chino, el del Perro, la noticia del desembarco del principal inversor oriental en Mediapro, la potente cadena privada de televisión de habla española, me parece que no está siendo valorada en lo que realmente significa. Si ya la alteración casi traumática (aunque finalmente sólo un poco absurda) de los horarios de las retransmisiones de la Liga de fútbol indicaba la potencia del factor oriental como determinante en la toma de decisiones, este paso supone de hecho el reconocimiento explícito y completo de quién tiene ya el control económico y la capacidad de decidir en la conocida plataforma de entretenimiento. 

No creo que tarden mucho en percibirse los efectos de la novedad, aunque también pienso que a estas alturas eso no importa demasiado, ni sus consecuencias van a ser llamativas en el anestesiado y anestesiante panorama televisual en que vivimos. 

En todo caso, qué lejos quedan aquellos míticos programas de «Humor amarillo», en los que, gracias a los imaginativos y desternillantes guiones de Herrera y Coll, tanto nos reíamos de las trompadas y tonterías, es especial las del «Chino Cudeiro», aquel prodigio de mestizaje, sin sospechar que a la vuelta de unos añitos la estética heredada de aquellos productos, más bien descerebrados en su formato original, puede estar a punto de colonizar nuestras pantallas. 

Habrá que irse preparando para ver cómo el Gran Wyoming cambia sus tirantes por una bata china o incluso por una chaquetilla de cuello mao. Y para todo lo que venga después.

Pessoa's sonnets


Original de uno de los poema ingleses de Pessoa.
Lecturas en voz alta, 👨‍💻56). Aquí enlazo la espléndida reseña del felizmente imparable y hasta ubicuo Antonio Rivero Taravillo (ART, en sigla bien acordada) sobre un libro, al parecer, espléndido. Y es Pessoa, ese heterónimo de sí mismo en el juego infinito de los espejos interiores, el que vuelve a dar una vez más muestra de un vigor inacabable, tal vez inabarcable. No un autor, una literatura. Más aún: un mundo en el que quedarse a vivir, si vivir en el sinvivir fuera posible. Parece mentira lo que dieron de sí las horas vivas de un oscuro oficinista. Y lo que seguramente aún nos queda por ver. Pessoa: un poeta cuántico.
Sus sonetos ingleses, que es lo que la reseña comenta, le hablan de tú a tú a la lengua de Shakespeare. Y quién sabe si al propio enmascarado de Stratford-upon-Avon. Del que, en esos misteriosos vericuetos biográficos que de cuando en cuando resucitan y vuelven a plantear dudas fantasmales, ¿quién puede asegurarnos que no fuera una fulguración anticipada de la misma “persona” universal? Para el lector atento —también para el que hace lo que pueda en medio del océano: y somos muchos—, nada es descartable. Y todo tiene concomitancias a menudo increíbles por la perfección con que encajan sus bordes.
Al fin y al cabo, todo está en los libros, esa constelación que algunos llaman universo. Y en nuestra mente. Amén.

jueves, 15 de febrero de 2018

Valor y necio



Todo necio confunde valor y precio.

Necio precio valor confunde y todo.
Confunde todo precio y valor necio.
Todo necio y valor confunde precio.
Precio todo y valor necio confunde.
Y todo precio confunde valor necio.

miércoles, 14 de febrero de 2018

Solpor

Atardecer en Madrid. AJR, 2018.

Demasïado pronto se ha hecho tarde
y no hay más cera ya que la sincera
canción del corazón, que aún quema entera
la noche y su silencio. Sobre el mar de
los días que se van a su manera
flota un resto de luz iluminada
por el terco deseo y por la espada
del sueño, que es descanso y es frontera.
Pero no hay lucha ya: asentimiento
a cuanto la sorpresa —se diría
que va a cumplirse así la profecía*—
de vivir en los límites del viento
pueda ofrecerte aún. La vieja danza
que busca la quietud en su mudanza.

Oteando OT



La ganadora de Operación Triunfo en una gala del programa. Foto José Irún.

(Lecturas en voz alta, 🎤53). Este artículo de Daniel Bernabé, además de servirme para actualizar cierta terminología de la música pop (¡todavía existe tal cosa!), me ha traído la lejana y añorada capacidad de raciocinio de Juan Cueto, que entre nosotros fue, si no el primero, sí el que con mayor brillantez nos ilustró sobre algunos aspectos de la sociedad de consumo de masas, a través de sus múltiples y bien enfocadas lecturas de Barthes, Baudrillard, Toffler o Eco, con su minucioso conocimiento en primera persona de los productos culturales más novedosos y, de forma especial, con su brillante capacidad metafórica. 

Ráfagas de esa misma melodía me parece escuchar en este análisis de la última Operación Triunfo — que hace unos días echó el cierre en su parte «académica» para iniciar el periplo intermmable— y en la denuncia, una vez más, de ciertas imposturas socioculturales y mediáticas frente a las que la resignación parece ser la única respuesta posible. 

Muy recomendable, en especial para todos aquellos que estén por debajo de la cincuentena (¡ay dios misericordioso, pero qué ”tarras” que somos ya algunos para poder hablar así y que no de desplomen lo cielos!) y, en general, para quienes quieran y puedan seguir dándole al “tarro” por caminos no veniales.