Foto © www.HardyJackson.de
Junto al placer de escuchar en directo a Leonard Cohen, otro de los gozos del concierto de la noche del pasado día 12 en el Palacio de Deportes de Madrid fue el descubrimiento, para mí, de un gran intérprete de instrumentos de cuerda (desde la guitarra de doce a la bandurria o el laúd): un mediterráneo llamado Javier Mas o Xavi Mas, como he podido comprobar que también se le llama en ámbitos musicales donde es bien conocido y comparado con los mejores del género.
Y con toda justicia. Porque la pericia y el arte que Mas despliega acompañando a Cohen no sólo son los responsables de que la música del poeta canadiense alcance una luminosidad (justamente, un acento mediterráneo) muy especial, sino que algunos de los momentos más vivos del concierto hay que apuntarlos a su forma de dialogar con la voz del artista, así como a varios solos (el que introduce Who by fire, por ejemplo) verdaderamente prodigiosos.
Y con toda justicia. Porque la pericia y el arte que Mas despliega acompañando a Cohen no sólo son los responsables de que la música del poeta canadiense alcance una luminosidad (justamente, un acento mediterráneo) muy especial, sino que algunos de los momentos más vivos del concierto hay que apuntarlos a su forma de dialogar con la voz del artista, así como a varios solos (el que introduce Who by fire, por ejemplo) verdaderamente prodigiosos.
Bien conocido por una trayectoria musical en compañía de grandes nombres, este guitarrista zaragozano afincado en Barcelona («from Barcelona, Jávier Mas», fueron las palabras de presentación de Cohen, que se quitó ante él el sombrero, literalmente, varias veces) es uno de esos artistas un poco –o completamente– ocultos bajo el peso estelar de las figuras que encabezan el cartel y que, sin embargo, emergen por sí solos a poco que se preste atención.
Dejo aquí, como prueba, los enlaces a dos vídeos que he podido localizar en Youtube (hay muchos más). Uno de ellos corresponde a la mencionada introducción de Who by fire durante el concierto de Nimes (agosto de 2008) [quien se quede con cierta sensación interrupta puede escuchar la canción completa, 8:48 minutos, en este vídeo correspondiente al concierto de Estambul]. El segundo es una grabación de una televisión finesa en la que Mas acompaña a otra de las voces inolvidables de la gira de Cohen (de vital importancia, además, en la trayectoria del artista canadiense desde hace ya algunos años), Sarah Robinson.
Supongo que para muchos no descubro nada. Pero no quería dejar pasar esta oportunidad de compartir el hallazgo de este mediterráneo, ya digo, por el que habrá que seguir navegando.
4 comentarios:
Pues no conocía a Mas, voy a buscar algo de él por la red.
Biquiños raparigo!
Hay, además de los colgados en la página, cosas muy interesantes. También yo sigo indagando. Graciñas pola visita. E máis bicos.
Es fantástico. Si no te hubiera leido habría pensado que el solo que hace en Estambul era interpretado por un artista oriental.
Me hubiera gustado poder estar en alguno de estos últimos conciertos de L. Cohen. Por la crónica que le leí a Ray Loriga y lo que te he leido a ti, debió ser fastuoso. Creo que en el último (¿Valencia?) tuvo un desvanecimiento, lo cual (además de la edad) me indica que será dificil que repita su éxito en España en próximos años.
Siempre nos quedará Youtube...
Abrazo fuerte.
Gracias, Manolotel. Esa impresión que transmite Javier Mas es como dices. Te traslada a espacios de luz y leyenda. En cuanto a Cohen, tras el percance de Valencia (al parecer debido a un corte de digestión), aún dio otro concierto en Barcelona. Ojalá haya nuevas ocasiones. Un abrazo.
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