Jan van Eyck: Retrato de un hombre (probablemente, un autorretrato), 1433. National Gallery, Londres. |
Durante los primeros años de lo que podía denominar, no sin retintín, su madurez, su primer impulso, al despertar, era un esfuerzo ligero y flexible para reconocerse. No puede precisar desde cuándo, pero ahora sabe que ha de poner todo su empeño, con constancia, a veces incluso con terquedad, en no olvidarse.
...