(Visiones en voz alta, 🌄39). Supongo que este mítico (ya sí) vídeo, junto a otros de la misma época y con similares protagonistas, estarán siendo repicados hoy a diestro y siniestro hasta formar parte de la banda sonora del triste día en curso. Fue más o menos por ese año de 1976, tal vez un año antes, en el Johnny, que él frecuentaba, o fugazmente en algún rincón del diario «Informaciones» (cuyos suplementos literarios yo coleccionaba con devoción), cuando entré en contacto con los peculiares monigotes de Forges, narigudos y gafotas, de trazo y formas amablemente redondeadas, y parlanchines ya de un lenguaje en el que no tardamos en encontrar una fuente de inspiración sin pausa de una manera traviesa, retóricamente aviesa e ingeniosamente atinada de codificar, ¡Gensanta!, el mundo. Y hasta hoy. En fin... habría tanto que contar... Pero iré de Forges a Borges, parodiando que es gerundio y con un brindis agradecido al maestro por tanta felicidad: «A mí se me hace cuento que se haya muerto el Forges:/ se habrá ido a pintarle las nubes al Gran Borde...» Buen viaje, don Antonio.
Posdata: La memoria juega malas pasadas. O simplemente desbarra a su manera. Repasando dibujos del maestro, me he topado con algunas portadas de Hermano Lobo, del año 1972, que seguramente conocí en su momento. Tirando de ese hilo, he caído en la cuenta de que Forges ya era un personaje bien conocido y sus chistes objeto de conversación con mis compañeros agustinos de El Escorial, donde estuve en los años 71 y 72. Ya por entonces su peculiar lenguaje empezaba a ser imitado por quienes siempre hemos tenido afición a inventar «palabros», o incluso «idiomos batiburrillos» completos, con mezclas de las más variadas procedencias. Aún recuerdo algún ejemplo del la jerga que empleábamos en Salamanca, allá por los finales de la década de los sesenta (aunque pueda parecer mentira, ya había mundo): «(Be)Nit nisán nit, cárcar, andand tutu la nui, mantalmentón, per tutus lasesqueins, acechanz, acechanz...» Imposible hacer traducción alguna.
Así despidió Forges a Mingote en 2012.. |