domingo, 16 de octubre de 2011

Madrid-Manhattan-Berlín...,
un sueño ¿posible?


Ayer, mientras caminaba con la columna de Prosperidad en dirección a Sol, también yo tuve un sueño... Sí, ese mismo que sería ingenuo (más) desmenuzar ahora con palabras que acabarían mirándose a sí mismas llenas de perplejidad... Seguro que a Leonard Cohen, otra vez, no le importará que le tome prestada esta canción que en cierto modo (pero de un modo muy cercano e inspirado) habla de lo mismo. O eso creo. Hay que seguir haciendo esfuerzos de imaginación sin dejar de llenar las calles.

lunes, 10 de octubre de 2011

ExTinta


Mantente atento,
que tanta tinta tonta
al tuntún t’unta.

Imagen de Watchmen: el fin está cerca, tomada de aquí.

viernes, 7 de octubre de 2011

Palabras de Steve Jobs


Es muy conocida pero merece resonancia. La intervención del recién fallecido Steve Jobs en la Universidad de Stanford en 2005, un año después de que se le hubiera diagnosticado el cáncer de páncreas al que finalmente no ha podido vencer, es una de las piezas oratorias más inspiradas del siglo XXI. Ahora constituye el verdadero testamento del hombre que probablemente más haya influido en el diseño del paisaje visual y comunicativo al que cada día nos enfrentamos. Parece que se ha puesto en marcha el rápido proceso de canonización laica de Steve Jobs; incluso estas letras podrían considerarse como una contribución a la causa. Pero nada más lejos de mi intención. No conozco bien la peripecia del fundador de Apple, ni me cuento entre los seguidores a ultranza de su blanca tecnología, aunque tengo un trato habitual y enriquecedor con algunos de ellos y en más de una ocasión he fantaseado con sumarme a su bando. Pero no se trata de eso. Estas líneas responden solo a la necesidad, casi la obligación, de subrayar el peso de unas palabras a las que, como a pocas de las oídas en foros públicos en los últimos años, convienen los adjetivos de verdaderas, necesarias y generosas. Y entre las que, además, se encuentra un «elogio del calígrafo» que por fuerza ha de resultar emocionante para todos aquellos que sientan amor por la escritura y hayan tenido alguna vez tratos con los nobles tipos móviles.

Descanse en paz el hombre que fue capaz de pronunciarlas.

Imagen de Steve Jobs tomada de somosmac.com

jueves, 6 de octubre de 2011

Anacroaristocráticoesperpentonirismo


Desde el lugar de le televisión apagada, a la hora de la siesta, me llega un sordo rumor: «La duquesa de Alba ha contraído matrimonio con Alfonso X». Me pareció oír después que alguien se arrancó con una cantiga, pero debe de tratarse de un error. (¿Claro!: Díez vale X),

Los ecos de la marea son tres palabras con nombre propio de los que no explicaré sus circunvoluciones (sírvase usted mismo):

Esperpento (aquí se comenta sin nombrarlo).

Esparadrapo (no consigo recordar la obra teatral aquella, probablemente de la rama del absurdo, en la que había un personaje con este nombre, pero lograré dar con ella).

Anacroaristocráticoesperpentonirismo (palabra transatlántico recién inventada con vocación alejandrina: que yo sepa, no es ninguna enfermedad, aunque los síntomas asustan mucho).

Y sobre las ausencias, se comprenden. Especialmente una. Yo estoy seguro de que Goya tampoco se hubiera personado. O solo con el propósito de tomar apuntes para alguna de sus pinturas negras.


Músicos de Las Cantigas de Santa María de Alfonso X el Sabio.
Imagen tomada de este blog

lunes, 26 de septiembre de 2011

Hum@redas


Mientras a golpe de ratón desenrollo de este a oeste 
uno de los manuscritos del Mar Muerto 
la luz de la Posada parpadea 
y en el reflejo de la pantalla veo o creo ver 
cómo en medio de la sala a mis espaldas 
surge del suelo 
igual que aquellos tulipanes psicodélicos brotando del asfalto 
la imagen tantas veces acordada de la Torre de Babel 
con sus pisos roídos por la ira divina 
y el hormiguero de hombres de todas las razas 
entregados a la absurda tarea 
de enladrillar el cielo y sus tropismos. 
Temblor y hastío: 
nunca pensé que la fascinación 
pudiera ser un rito semejante 
a la osadía de rasgar el muñeco 
para explorarlo a fondo 
y encontrarse de pronto con las manos 
por completo atrapadas 
en el minucioso desorden del serrín. 
No se puede buscarle sentido al sentido. 
No se explica la respiración.

(Buenas noches. No se lo tomen a mal. 
De alguna forma había que volver.)

Procedencia de la imagen: 

miércoles, 10 de agosto de 2011

Haikus de agosto


(Por San Lorenzo)
I
La luna llora,
noche láctea de agosto: 


lluvia de estrellas.

  (Para SP, pues casi es suyo.)



II
Y dijo el santo:
«Dame la vuelta y come».
Carne de piedra. 



III
Magia o milagro:
en el cielo de Vincent

suena la noche.



Imagen de las Perseidas (foto superior) tomada de la web tiempo10.com
La del Monasterio del Escorial procede de aquí.