lunes, 11 de enero de 2016

Boulez (vous dancer avec) Bowie


La gran música está de luto. Mueve sus caderas a ritmo de réquiem. Abre y abre los ojos de sus notas hasta dejarlos en blanco. Silencio. El pasado día 5 murió Pierre Boulez. Hoy acabamos de no creernos que se haya apagado David Bowie. Algo tan irreal como que tuviera 69 años. O como que haya tenido la tan estremecedora como valiente lucidez de anticiparnos imágenes de su muerte, en este Lazarus, que ahora cobra todo su sentido. La banda sonora del planeta, a la que los dos han contribuido tanto, no dejará de sonar. Y ya de buena mañana, en este 2016 frenético, nos volvemos a preguntar, ay ay ay, por quién doblan las campanas.

Imágenes
Pierre Boulez dirigiendo la Orquesta Acadamy, en el festival de Lucerna, en 2006. Foto Sigi Tischler/AP.
David Bowie en una actuación. Foto Ron Frehm/AP.

3 comentarios:

Alfredo J Ramos dijo...

Han cambiado tanto las cosas en el terreno de la comunicación en estos últimos años, que un lugar tan modesto como este blog se puede adelantar (y en varias horas) a medios tan importantes como RTVE o «El País», a la hora de poner a disposición del público lector un contenido. Anoche me sorprendió comprobar que el programa 24 Horas de TVE cerraba con el vídeo Lazarus, aunque en una versión reducida y abruptamente interrumpida por unos planos de los tejados del Pirulí. Hoy "El País" tiene en un lugar destacado de la cabecera de su web esa misma información. No es la primera vez que algo así ocurre, pero nunca me había parecido tan evidente y drástica la transformación en el tradicional orden informativo que han traído consigo las nuevas tecnologías ligadas a internet. Y parece claro, además, que es un proceso que no ha hecho más que empezar. Esto, definitivamente, es otro mundo. Si McLuhan levantara la cabeza...

Navajo dijo...

Efectivamente, Alfredo, no se acaba de creer la noticia. Uno pensaba que los "marcianos" deberían ser inmortales. Lo que sí son, desde luego, es consecuentes hasta el final; ese vídeo representa el esfuerzo de Bowie por dejar un bello, ya que no joven, cadáver. ¡Qué inquietante figura la del armario: cuánto misterio y cuánta oscuridad en su interior! Otra cosa que Ikea ha destruido.
Respecto a la indudable inmediatez que permite Internet, tal vez en este caso concreto tenga algo que ver el tema de los derechos de copia; afortunadamente los blogueros vamos por libre en eso del copyright, lo que nos da una pequeña ventaja sobre los grandes medios.
Un abrazo (y esperemos que de verdad haya vida en Marte).

Alfredo J Ramos dijo...

Una pequeña gran ventaja, Navajo. De hecho, apunta hacia una metamorfosis del panorama informativo. Lo que, a su vez, explica que ya comiencen a ser la propias redes sociales (y similares) fuentes primarias de lo noticiable. Quizás tendríamos que volver a la Facultad para corregir algunas cuestiones no menores en los apuntes de Teoría de la Información y, más aún, la historia y evolución de los medios.